UNIDAD 3 TAREA 7

ENSAYO SOBRE LAS PAGINAS 28 A 38 DEL LIBRO LA INFANCIA DE UN MAGO DE HERMANN HESSE

Esta historia nos narra la infancia de un joven el cual empezó con muchos anhelos de ser reconocido en el área de la poesía algún día, todo empieza cuando se le dijo al redactor-jefe  que el cajista Johannes, que esperaba con desesperación para ser recibido pero simplemente ellos le daban excusas para que no lo recibieran. Sabía de antemano porque el fiel cajista de barba blanca había tomado esa determinación. Como el hombre era un cajista que trabajaba en el periódico hace años no solo era simpático y excelente persona, sino un hombre con muchos conocimientos. Después de que Johannes esperara el redactor-jefe lo dejo pasar y le pregunto cómo le iba y o si tenía alguna queja.  Johannes triste y avergonzado le dijo que era el mismo problema de siempre, pero este se iba empeorando, Johannes le fue explicando sobre todo lo que había ocurrido con su problema que tenía, luego empezó a hacer halagos al redactor-jefe por sus buenas publicaciones de sus artículos que lo llenaban de emoción, no como los artículos aburridos que los otros escritores publicaban con sus grandes errores al narrar, describir y la faltas gramaticales que tenía los diferentes autores. El redactor, que en todo el discurso no había interrumpido, después del que todo el tiempo él tuvo en un estado de meditación abrió los ojos y le dijo a Johannes que tenía toda la razón. El cómo cajista debe de comprobar diariamente esta decadencia y, más aun, tiene que tomar parte activa en ella y en cierta manera favorecer. Johannes traes escuchar las palabras del redactor-jefe se movió bruscamente y el redactor-jefe trato de buscar otras palabras para calmar las ansias de Johannes. El redactor-jefe le explico que la lectura de las poesías que se leían antes, había dejado de ser leídas por las personas y tuvieron que renunciar tanto el redactor como Johannes a esa pasión que tenían por escribir para buscarse un trabajo normal. El redactor le hizo una pregunta inesperada la cual Johannes se quedó atónito sin saber que contestar, el jefe lo miro con una cara triste y empezó a platicar en voz baja. Luego de ahí Johannes le pidió disculpas por la molestia que le había causado en ese momento. Le explico que quería trabajar con él, no le importaba el sueldo, solo le importaba continuar con su trabajo que había dejado anteriormente, el señor redactor solo lo miro y con unas palmadas en los hombros. Johannes seguí un poco alterado pero después se calmó y continúo platicando con él con más tranquilidad y le siguió contando sobre su pasión sobre la poesía y de los tantos autores que había leído durante su vida. El redactor solo se agitaba con profundo malestar, en un doble y torturante razonamiento sobre el destino del pobre viejo. El solo continúo en voz baja y fatigada platicando Johannes.  Platicaba sobre que él se hizo cajista porque era un trabajo que había aprendido por casualidad al trabajar desinteresadamente en una editorial.  El siguió expresando el amor que tenía por la poesía y la pasión que ponía en cada una de sus obras, recomponiendo frases imperfectas entre otras cosas. Johannes invitaba a ver una columna sobre una noticia con las de otros para ver la calidad que tenía el cómo escritor, el cual otras escritores descuidaban el amor que se debía de tener por una lectura rica y amable hacia el lector. Aunque el redactor conocía a Johannes desde hace docenas de años atrás, jamás le había oído dar un discurso tan apasiona mente, aunque en el interior de él se revelara y defendiera contra lo estúpido y exagerado de su discurso. Después del largo discurso que le dio Johannes al redactor lo convenció con los argumentos y lo mantuvo en su puesto de trabajo en el cual él estaba, le dio la mano y le agradeció por la nueva oportunidad. Después de salir de la oficina del jefe, empezó a escribir las nuevas columnas que se publicarían pero después de   media hora después de reconstruir en la imprenta toda la columna llena de indescriptibles faltas el viejo Johannes cayo sollozando en sus manuscritos y medio hora después murió. Entraron la gente en la imprenta. El encargado de la imprenta dio la noticia sobre la muerte con un la publicación de una noticia con el título “El trágico fin de un poeta”